El exceso de construcción de viviendas le está costando caro a los ayuntamientos costeros, que son los que acumulan el mayor número de casas en venta , y en consecuencia, a los vecinos. Mientras que la morosidad de los contribuyentes municipales no ha registrado el aumento más llamativo -un 3% en San Javier o un 5% en San Pedro del Pinatar-, el principal agujero pertenece a los promotores inmobiliarios, que deben al menos 18,5 millones de euros en concepto de Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) impagado por las casas que han construido en los últimos años y que no han podido vender. La cifra real es aún superior, ya que el Ayuntamiento de Águilas desconoce cuánto le deben los constructores, según respondieron fuentes municipales.
Hileras de casas que nacieron con el reclamo de las playas murcianas en los años de ''El Dorado'' inmobiliario y que ahora se han convertido en un agujero para los vecinos.
La deuda más abultada la tienen los promotores con la Hacienda local de Mazarrón, cerca de 10 millones de euros que, según el concejal de Hacienda, Andrés Valera, «si hubiéramos cobrado no tendríamos que pedir ayuda al Estado para el pago a proveedores». El edil asegura que «la mayor parte está ya en vía ejecutiva, pero la dificultad está en que no se puede hincar el diente a nada porque algunas de las empresas deudoras han entrado en concurso de acreedores». «Cientos de casas», según estima Valera, que se encuentran en el limbo de la fiscalidad municipal. A la deuda ya reconocida en concepto de IBI se suman, afirma el edil, «lo que deben por instalaciones mal hechas, problemas con el alcantarillado y demás».
Aún hay otro coladero, a juicio del concejal, «porque se está perdiendo dinero porque no se han catastrado las viviendas», de modo que la base imponible del impuesto de Contribución municipal es inferior al real.
A Mazarrón le sigue en la cuantía de la deuda que tiene pendiente de cobrar a los promotores el Ayuntamiento de San Javier, 5 millones de euros que al propio alcalde, Juan Martínez Pastor, sorprendió cuando le informaron los técnicos municipales. «Es una deuda acumulada de varios años, de gente que ha hecho casas y no ha pagado el IBI», explica el regidor. Martínez Pastor destaca el hecho de que haya aumentado la morosidad de los vecinos solo un 3%, en contra de lo que cabría pensar por la crisis, además de la disposición de pago de los particulares, que se refleja en el notable aumento de la petición de fraccionamientos y aplazamientos de pago.
Dificultades para notificar
Otro agujero con categoría de cráter es el que tiene abierto el Ayuntamiento de Los Alcázares con las cuentas pendientes de los promotores, principalmente de dos. Según el concejal de Hacienda, Patxi López, son dos empresas las que tienen la deuda más importante con el Ayuntamiento, Las Lomas de Pozuelo, S.A., que debe 1.612.708,35 euros por recibos de IBI desde 2008, y la mercantil Masdevalía, que adeuda 1.254.000 euros.
Con la primera en concurso de acreedores y la segunda en régimen de intervención judicial por sus conexiones con las investigaciones por corrupción urbanística en Los Alcázares y en Marbella, el concejal no sabe «si las cobraremos». «Si por lo menos tuviéramos un plan de pagos», indica López, quien mantiene reuniones con el interventor judicial para avanzar en las negociaciones del cobro. Con la empresa que levantó parte de las edificaciones que bordean el campo de golf La Serena, el edil asegura que «intentamos notificarles, pero juegan al ratón y al gato». Se suman a las dos grandes deudas los 57.000 euros que deben otros promotores en concepto de IBI de 2011 en Los Alcázares.
Por su parte, el Ayuntamiento de San Pedro del Pinatar no se libra del agujero de los promotores inmobiliarios. A pesar de que el 2011 se recaudó más que en el año anterior, según afirma el concejal de Hacienda, José Fernández Andreo, «hubo un aumento de 5 puntos en la morosidad general, de los que 3,7 puntos es de los promotores». El edil cree, por tanto, que la crisis ha influido «más en los promotores que en los particulares».
De hecho, las arcas pinatarenses mantienen viva una deuda de 463.000 euros con los constructores, de los que 288.000 euros corresponden al IBI sin cobrar de 2011 y 175.000 euros de 2010. «Esta deuda entra en vía ejecutiva y se cobrará, pero el problema es que muchas de estas empresas están en concurso de acreedores o las casas se las han quedado los bancos». El concejal cree que «es difícil negociar el cobro con los promotores, pero nunca se pierda la confianza de cobrarlo, de hecho la deuda siempre está vigente aunque pasen años, a pesar de que la deuda se va depreciando, pero tenemos impuestos sin cobrar desde hace 10 y 15 años que aún siguen vivos».
Un hecho en el que coinciden los ediles es que si los promotores hubieran liquidado sus deudas algunos ayuntamientos no hubieran tenido que pedir la ayuda del Estado para el pago a proveedores.
Es el caso de San Javier, cuyo descubierto por facturas impagadas a empresas asciende a 5.313.973 euros, la cifra que ha pedido al Gobierno central, mientras que los promotores inmobiliarios le deben 5 millones de euros. Inversiones que no se realizarán o programas sociales que han sufrido recortes tienen su explicación en esta falta de ingresos.
http://www.laverdad.es/murcia/v/20120325/comarcas/promotores-deben-millones-cuatro-20120325.html
Hileras de casas que nacieron con el reclamo de las playas murcianas en los años de ''El Dorado'' inmobiliario y que ahora se han convertido en un agujero para los vecinos.
La deuda más abultada la tienen los promotores con la Hacienda local de Mazarrón, cerca de 10 millones de euros que, según el concejal de Hacienda, Andrés Valera, «si hubiéramos cobrado no tendríamos que pedir ayuda al Estado para el pago a proveedores». El edil asegura que «la mayor parte está ya en vía ejecutiva, pero la dificultad está en que no se puede hincar el diente a nada porque algunas de las empresas deudoras han entrado en concurso de acreedores». «Cientos de casas», según estima Valera, que se encuentran en el limbo de la fiscalidad municipal. A la deuda ya reconocida en concepto de IBI se suman, afirma el edil, «lo que deben por instalaciones mal hechas, problemas con el alcantarillado y demás».
Aún hay otro coladero, a juicio del concejal, «porque se está perdiendo dinero porque no se han catastrado las viviendas», de modo que la base imponible del impuesto de Contribución municipal es inferior al real.
A Mazarrón le sigue en la cuantía de la deuda que tiene pendiente de cobrar a los promotores el Ayuntamiento de San Javier, 5 millones de euros que al propio alcalde, Juan Martínez Pastor, sorprendió cuando le informaron los técnicos municipales. «Es una deuda acumulada de varios años, de gente que ha hecho casas y no ha pagado el IBI», explica el regidor. Martínez Pastor destaca el hecho de que haya aumentado la morosidad de los vecinos solo un 3%, en contra de lo que cabría pensar por la crisis, además de la disposición de pago de los particulares, que se refleja en el notable aumento de la petición de fraccionamientos y aplazamientos de pago.
Dificultades para notificar
Otro agujero con categoría de cráter es el que tiene abierto el Ayuntamiento de Los Alcázares con las cuentas pendientes de los promotores, principalmente de dos. Según el concejal de Hacienda, Patxi López, son dos empresas las que tienen la deuda más importante con el Ayuntamiento, Las Lomas de Pozuelo, S.A., que debe 1.612.708,35 euros por recibos de IBI desde 2008, y la mercantil Masdevalía, que adeuda 1.254.000 euros.
Con la primera en concurso de acreedores y la segunda en régimen de intervención judicial por sus conexiones con las investigaciones por corrupción urbanística en Los Alcázares y en Marbella, el concejal no sabe «si las cobraremos». «Si por lo menos tuviéramos un plan de pagos», indica López, quien mantiene reuniones con el interventor judicial para avanzar en las negociaciones del cobro. Con la empresa que levantó parte de las edificaciones que bordean el campo de golf La Serena, el edil asegura que «intentamos notificarles, pero juegan al ratón y al gato». Se suman a las dos grandes deudas los 57.000 euros que deben otros promotores en concepto de IBI de 2011 en Los Alcázares.
Por su parte, el Ayuntamiento de San Pedro del Pinatar no se libra del agujero de los promotores inmobiliarios. A pesar de que el 2011 se recaudó más que en el año anterior, según afirma el concejal de Hacienda, José Fernández Andreo, «hubo un aumento de 5 puntos en la morosidad general, de los que 3,7 puntos es de los promotores». El edil cree, por tanto, que la crisis ha influido «más en los promotores que en los particulares».
De hecho, las arcas pinatarenses mantienen viva una deuda de 463.000 euros con los constructores, de los que 288.000 euros corresponden al IBI sin cobrar de 2011 y 175.000 euros de 2010. «Esta deuda entra en vía ejecutiva y se cobrará, pero el problema es que muchas de estas empresas están en concurso de acreedores o las casas se las han quedado los bancos». El concejal cree que «es difícil negociar el cobro con los promotores, pero nunca se pierda la confianza de cobrarlo, de hecho la deuda siempre está vigente aunque pasen años, a pesar de que la deuda se va depreciando, pero tenemos impuestos sin cobrar desde hace 10 y 15 años que aún siguen vivos».
Un hecho en el que coinciden los ediles es que si los promotores hubieran liquidado sus deudas algunos ayuntamientos no hubieran tenido que pedir la ayuda del Estado para el pago a proveedores.
Es el caso de San Javier, cuyo descubierto por facturas impagadas a empresas asciende a 5.313.973 euros, la cifra que ha pedido al Gobierno central, mientras que los promotores inmobiliarios le deben 5 millones de euros. Inversiones que no se realizarán o programas sociales que han sufrido recortes tienen su explicación en esta falta de ingresos.
http://www.laverdad.es/murcia/v/20120325/comarcas/promotores-deben-millones-cuatro-20120325.html
